NUEVA YORK. Las autoridades de Nueva York arrestaron hoy a la actriz Allison Mack, conocida por su papel en la serie “Smallville”, acusada de tráfico sexual por su presunta implicación en la secta Nxivm.
Mack, de 35 años, que comparecerá en las próximas horas ante un tribunal de esta ciudad, es presuntamente responsable de tráfico sexual y de conspirar para obligar a personas a realizar trabajos forzados.
En un comunicado, el fiscal del distrito este de Nueva York, Richard P. Donoghue, explicó que la actriz “reclutó a mujeres” para que se unieran a un supuesto grupo de tutoría femenino “creado y liderado” por Keith Raniere, acusado de los mismos cargos.
Se declara “No culpable”
Tras su arresto del viernes tras regresar voluntariamente desde México, compareció en la corte federal de Brooklyn, donde se declaró “no culpable” de los cargos de tráfico sexual y trabajo forzado en el supuesto programa de autoayuda NXIVM que operaba en las afueras de Albany.
Keith Raniere (57), líder de la secta NXIVM, quedó detenido el 13 de abril en Manhattan sin derecho a fianza tras ser acusado formalmente de tráfico sexual, luego de ser atrapado en México a fines de marzo. Ahora enfrenta posible cadena perpetua.
Durante la comparecencia en la corte del viernes, se reveló que Mack (35) se casó el año pasado con la actriz canadiense Nicki Clyne (35), que también fue vista escondiéndose en una lujosa casa en Puerto Vallarta, junto a Mack y Raniere, cuando las autoridades rastrearon al líder de culto el mes pasado.
Mack fue definida por los fiscales como una “esclava” de Raniere que también actuó como “maestra” de otras esclavas, que fueron privadas de alimento y marcadas como ganado en sus partes íntimas.
“Fue uno de los principales miembros de un plan altamente organizado que fue diseñado para proporcionar sexo” a Raniere “bajo el disfraz del empoderamiento de las mujeres“, dijo el viernes ante el tribunal la fiscal federal adjunta, Moira Penza.
Los fiscales dicen que tienen correos electrónicos de Mack prometiendo su “vida total y completa” a Raniere y ofreciendo “cimentar” el voto de fidelidad con su propia garantía, incluido un contrato de darle a él la custodia de sus posibles hijos y una casa si ella rompía el acuerdo, además de una carta reconociendo haber abusado de sus sobrinos.