SAN JUAN. Las autoridades puertorriqueñas pidieron a la población de la isla que de cara a la próxima temporada de huracanes que comienza en junio se prepare para que cada hogar disponga de los suficientes suministros para subsistir durante 10 días sin ayuda gubernamental.
El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, dijo hoy en videoconferencia que a raíz del paso del ciclón María del pasado año se decidió que la temporada de huracanes requiere que los planes de emergencia establezcan medidas adicionales para paliar los efectos de los fenómenos atmosféricos, lo que incluye estar preparados para 10 días.
Rosselló, de viaje por Estados Unidos, dijo que el objetivo de los esfuerzos es reducir el tiempo de respuesta ante estos fenómenos ciclónicos y el de vuelta a la normalidad.
El Departamento de Seguridad Pública (DSP) informó que dentro de los cambios que se han implementado, a partir de las experiencias vividas con el huracán María, está el que el plan doméstico familiar contemple abastos de suministros -agua, alimentos, medicinas, combustible y cualquier elemento necesario- para subsistir durante 10 días sin depender de ayuda alguna.
Antes del huracán María la recomendación era para un máximo de 3 días.
Además, se han realizado reuniones y acercamientos con varios representantes de la empresa privada -ferreteros, representante de la industria de alimentos, combustible, telecomunicaciones, transportistas, entre otros- para que sean parte del Centro de Operaciones del Gobierno (COE).
El objetivo es el de ser más eficientes en la coordinación de los servicios.
Por otro lado, el Negociado para el Manejo de Emergencia y Administración de Desastres (NMEAD) trabaja de la mano con la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) en la actualización y revisión de los planes de emergencia del Gobierno y de las agencias primarias en una respuestas de emergencia considerando el nivel catastrófico.
“Desde los pasados meses hemos trabajado arduamente en todo lo relacionado con la actualización de los planes de emergencia del Gobierno y de las agencias primarias de respuesta ante una eventualidad para que contemplen el nivel catastrófico, todo según la experiencia vivida con el huracán María”, dijo el comisionado interino del NMEAD, Carlos Acevedo.
El funcionario destacó que se han sostenido múltiples reuniones con la empresa privada, organizaciones comunitarias, entidades gubernamentales y no gubernamentales para que cuando se tenga que activar el Centro de Operaciones de Emergencias del Gobierno haya plena integración.
Acevedo insistió en la importancia de desarrollar un plan doméstico familiar, considerando cada necesidad de cada miembro.
“FEMA es un elemento crucial en cuanto a emergencias y desastres se refiere, con lo cual luego del paso del huracán María trabajamos en conjunto para mantener la ayuda necesaria para las comunidades e implementar los cambios necesarios para que nuestro sistema sea uno más ‘resiliente’ para los posibles eventos futuros”, indicó el secretario del DSP, Héctor Pesquera.
Por su parte, el representante de FEMA a cargo de la preparación para eventos futuros, Alejandro de la Campa, indicó que a partir de las lecciones aprendidas tras el paso de los huracanes Irma y María se ajustaron nuestros esfuerzos de preparación a la situación de las comunidades en Puerto Rico.
La presidenta de la Junta Reglamentadora de Telecomunicaciones (JRT), Sandra Torres, se unió por su parte al mensaje de preparación apuntando a que la red de comunicaciones fue un elemento crucial en el momento de la emergencia del huracán María, por lo que se continúan los esfuerzos para mantener una red robusta para eventos futuros.
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