En el escrito del 17 de octubre del año 2014, Mena Batista, solicita al director de prisiones su retorno a La Victoria, ya que el día anterior había sido trasladado a la cárcel Concepción de La Vega.
“Yo no estoy seguro en ninguna cárcel que no se La Victoria, ya que está pagando la suma de 3 millones de pesos por mi cabeza, por parte del señor Pascual Cordero, a quien apodan “El Chino”. Como no han podido lograr sus objetivos en La Victoria, intentan hacerlo fuera de allí”, apuntó el recluso.
Que estaban poniendo en peligro no sólo su vida, sino también el sistema penitenciario, relató el occiso, agregando que “Manos enemigas usaron el sistema para provocar mi traslado” y que “Sólo quiero volver para La Victoria para que mi vida esté más segura y mi familia más tranquila”
Cuatro días después, su petición fue acogida, pero Mena Batista nunca imagino que al cruzar el peaje de regreso a La Victoria, donde supuestamente se sentía seguro, en menos de 72 horas perdería la vida. El reo Luis Alfredo De Aza Núñez, condenado a la pena máxima por homicidio, le descargó los seis tiros de un revolver. A CONTINUACIÓN VÍDEO: